Me encantó esta frase que encontré leyendo un interesante libro sobre el amor y cuándo no! el amor está impregnado de gotas de limón a lo largo de su historia.
Es asombroso el número de parejas que están sufriendo amarguras, y en vez de enfocarse en limar asperezas y prestar atención a las necesidades del otro, solo se mantienen afirmando cada vez más sus actitudes erróneas y fuera de contexto.
No hay nada más triste y amargo que romper una ilusión, una fantasía amorosa! y los hombres generalmente pecan de "poco tacto" como para lidiar con ellas.
Toda mujer quiere sentirse amada, admirada y deseada. Toda la vida de una mujer gira alrededor de ello aunque no todas tengan consciencia de esto.
Una mujer generalmente se viste, se maquilla, se perfuma, se adorna para los demás, para agradar a los demás. Es muy difícil, aunque si sucede, que se arreglen sólo para ellas mismas.
Su mente le coloca imágenes de ella con esa ropa en la calle, en la oficina, en la casa, en una reunión mientras las combina y se las calza. Es así siempre, aunque no tengan noción de ello.
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Por lo tanto cuando una mujer recibe una reacción de los demás diferente a la imaginada o fantaseada, es como exprimir un limón en su alma y por ello no tendrá las ganas ni la capacidad de regalar el néctar de una sabrosa naranja.
Son actitudes aprendidas a lo largo de la vida que siempre hablan de apegos y de la necesidad de agradar para ser amadas y el hombre en vez de ganar terreno con este viento favorable, es tan ignorante sentimentalmente, que marchita las alas de bienestar de sus tiernas y enamoradas parejas.
Les pongo ejemplos: Una mujer se compra un bonito conjunto de ropa interior, junta pesito a pesito para comprar el conjunto que ella desea soñando una noche romántica e inolvidable con su pareja. En su mente, ella siempre es como la modelo del catálogo.
Llegado el momento se presenta toda agitada y excitada con su nuevo conjunto y no recibe la expresión en el rostro que esperaba y lo que es mil veces peor, es presa de la burla.
Lo más perverso del caso es que al final, amargada, dolida y sin ganas, muchas veces termina complaciendo al bruto, porque de eso se tratan los apegos y si decide hacer lo que realmente quiere, (huir), terminan en una crisis muy difícil de solucionar.
Este es un solo ejemplo, hay variados y muy distintos pero con el mismo resultado.
Por lo tanto, a las mujeres : si aumentas tu autoestima y por ti misma mejoras tu capacidad de hacerte valer, vas a crear esas alas invisibles que te permitan ser tu misma y a gusto de ser cómo y quién eres. Tu eliges con quién quieres estar.
A los hombres: el éxito en tus relaciones se basa en tu sensibilidad frente a tu pareja. Si no eres empático y condescendiente, no importa que seas un Adonis, solo eres un ser reemplazable en la mente de tu mujer, aunque nunca te lo diga.
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