Te voy a presentar dos respuestas diferentes:
1- Sí, una persona puede sufrir tanto hasta el punto de no sentir nada, como una forma de protegerse del dolor. Esto se conoce como anhedonia, que es la incapacidad para sentir placer, alegría o interés en actividades o relaciones que antes sí provocaban ese bienestar.
La anhedonia puede ser un síntoma de la depresión, pero también puede aparecer por otras causas, como el estrés prolongado, el trauma o el abuso.
La anhedonia puede hacer que la persona se sienta vacía, apática y desconectada de sus emociones y de los demás.
2- Otra posible respuesta es no, una persona no puede dejar de sentir nada por completo, sino que simplemente se vuelve insensible al dolor ajeno. Esto se llama insensibilidad emocional, y puede ser un mecanismo de defensa ante situaciones difíciles o amenazantes.
La insensibilidad emocional puede hacer que la persona se muestre fría, indiferente o incluso cruel con los demás, sin tener en cuenta sus sentimientos o necesidades. La insensibilidad emocional puede ser un rasgo de personalidad, pero también puede ser una consecuencia de experiencias negativas o traumáticas.
Como ves, hay diferentes formas de entender lo que significa no sentir nada, y cada una tiene sus causas y consecuencias. Lo importante es saber que no es algo normal ni saludable, y que se puede superar con ayuda profesional y personal.
Si te sientes identificado/a con alguna de estas situaciones, te animo a que busques apoyo y orientación psicológica. No estás solo/a, y mereces volver a sentir y disfrutar de la vida. Puedes visitar mi página web en donde encontrarás material de apoyo y terapia online.
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