💔 Cuando la infidelidad rompe el alma

Nadie está preparado para una traición. No importa cuánto amor hayas dado, ni cuántas veces te hayas dicho que esta vez sería diferente.Cuando la infidelidad llega —sin aviso, sin explicación, sin defensa posible—, no solo se rompe una relación: se quiebra una parte de ti.

Te quedas suspendida/o entre el pasado y el presente, entre la rabia y la tristeza, entre el “¿por qué me hizo esto?” y el “¿cómo sigo adelante?”.Y ahí, en ese abismo emocional, el cuerpo tiembla, la mente repite, y el corazón no encuentra consuelo.

Pero hay algo que el dolor no sabe: que cada ruptura puede convertirse en un portal.

Un umbral hacia una nueva versión de ti misma/o. No de quien ama por miedo, sino quien ama con conciencia. No la que se entrega sin límites, sino la que se reconoce como fuente de amor.

Sanar no significa olvidar. Sanar es entender que lo que se rompió no fue tu valor, sino la ilusión de que el amor debía doler. Es recordar que mereces un amor que no te haga elegir entre tu paz y tu compañía.

Y sí… duele. Pero también transforma. Cada lágrima que cae limpia una herida, cada silencio abre espacio para algo nuevo.

Poco a poco, el alma aprende que no fue el final: fue el inicio de tu regreso a ti.

🌿 Adriana Muñoz Psicóloga | Dra. Amor y Vida

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